He leído a varias jugadoras quejarse a lo largo de estas semanas porque el club en el que militaban, terminada la temporada una vez que se acabaron las competiciones, han cambiado de entrenador para la próxima campaña y suele pasar que este no cuenta con algunas jugadoras de la plantilla.
La confección de las plantillas viene a ser la muda de piel de los equipos en la que muchas jugadoras se ven obligadas a hacer las maletas y emigrar al no contar el club con sus servicios.
Equipos que habrán cambiado casi en totalidad la piel son por ejemplo el Guardés, Granollers, Gijón.
Otros equipos lo arreglan con nuevas incorporaciones como Málaga, Rocasa, Bera Bera.
Después están los equipos que ascienden a División de Honor y se deshacen de jugadoras que han conseguido el ascenso creyendo que con ello podrán competir con los grandes clubes habituales en la Liga Iberdrola, lo que para mí es un error, porque si no tienes sistema no tienes nada y te van a crujir igualmente.
Como dice un informador en las redes sociales hoy es 30 de mayo y la inmensa mayoría de las plantillas están configuradas y el mercado está complicado, ya que a las jugadoras se las trata como mercancías.
Esta observación choca con los intereses de los equipos que hacen un cambio radical en el cuerpo técnico, que provoca que el nuevo entrenador no cuente con algunas jugadoras de la plantilla porque tiene otras que le son afines al organigrama que quiere implementar para competir en la máxima categoría.
Como dice otra jugadora también obligada a emigrar por lo general así funcionan los intereses de los clubes del balonmano femenino español, las jugadoras son números en un mercado amplio, no son simplemente personas ni importa lo que se ha hecho en el club a menos que sea una estrella insustituible.
Como dice otro informador, sucede a menudo cuando se sube de categoría, se piensa que hay que hay que fichar mucho y con nombre sin reconocerse que una veterana con experiencia aporta cosas a la plantilla que las jugadoras nuevas no, que es la experiencia que se necesita para no descender de nuevo.
Yo estoy muy de acuerdo con esto último. Los equipos que ascienden de categoría suelen tener conocimientos chatarra sobre entrenamiento y sistemas de entrenamiento lo mismo que de alta intensidad.
Suelen ser víctimas fáciles de los equipos ya clásicos en la Liga Iberdrola que corren muchísimo y dejan bloqueados a los pardillos, los nuevos equipos que sobreviven como pueden en la cola de la clasificación sumando los partidos por derrotas.
Ya lo digo en otros artículos: "Si no tienes sistema no tienes nada. Ya puedes cambiar de entrenador y echar a un montón de jugadoras con nombre que sonarás a chatarra."