Mejor exponer y enseñar que debatir con los muros. Así los que no lo entienden lo entenderán.
Supongamos en balonmano femenino, que los ataques son cuestas. Cuanto más complicadas mayor porcentaje de inclinación. Aún más cuando pasan los segundos y las jugadoras no han podido enganchar un gol.
Por el contrario, volver a la defensa tras los ataques son las bajadas. A mayor nivel gastado en los ataques más difíciles las recuperaciones bajando a la defensa, aunque cambien alguna jugadora no la cambian todas.
Estamos hablando de los últimos cinco minutos en el Bera Bera - Málaga Costa.
1. El tiempo muerto sucede en minuto 24:35 de la segunda parte. El Málaga Costa gana 22-23.
2. En el siguiente ataque el Málaga Costa se coloca a dos goles, 22-24.
Pero en el regreso a la defensa no recuperan bien y el Bera Bera les endosa sin oposición el 23-24.
3. En los siguientes ataques el Málaga Costa se coloca a 24-25 ya que el Bera Bera en las bajadas a defensa de las panteras, como no recuperan bien, les mete goles fácilmente, ora por el extremo ora de penalti.
4. En los siguientes ataques el Málaga Costa pierde los muebles. Falla cuatro posibles goles con precitación desde el extremo, desde el pivote, un frontal contra la defensa y un disparo desde el lateral izquierdo, permitiendo que el Bera Bera empate el partido.
Y menos mal que tras eso hubo tiempo muerto de Bera Bera, que permitió la recuperación en la bajada a defensa del Málaga Costa tras el último fallo.
Si yo fuese entrenador del Bera Bera, para nada pido tiempo muerto, y menos aún cuando mis jugadoras meten goles a la contra.
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